En la astronomía, la alineación de dos o más planetas, vistos desde la Tierra, se llama conjunción. Según el Merriam-Webster Dictionary, si al menos tres cuerpos se encuentran alineados en el mismo sistema gravitacional, el fenómeno se denomina “sizigia” y ocurren en el proceso cuestiones extraordinarias. Aclarado este punto, y desde una óptica netamente minera, invitamos a analizar la siguiente analogía.
Cada vez resulta más frecuente escuchar el relato de mujeres que en distintos campos han alcanzado un protagonismo importante y que realizan actividades que normalmente hacían sólo los hombres, o que los resultados de su intervención resultan igual o más efectivos que aquellas tareas realizadas tradicional y exclusivamente por el sexo masculino.
Profundizando un poco más en este concepto, podríamos aseverar también que en nuestra actividad, la minería, la brecha entre las labores específicas se ha acortado significativamente entre ambos sexos. En el seno de la actividad minera ya nadie parece sorprenderse cuando se detiene cualquiera de las máquinas pesadas y del interior sale una mujer, con señal de satisfacción en su rostro, luego de haber concretado la tarea diaria con excelencia y calidad profesional, por sólo citar un ejemplo.
En el caso particular de Mina Cerro Moro, se cuenta con mujeres que no sólo realizan este tipo de tareas, sino que además han sido destacadas por ello en diversos ámbitos y niveles. “En tal sentido podemos comentar que tenemos mujeres perforistas, explosivistas, geólogas, jefas del servicio médico, administrativas de primer nivel e incluso desempeñándose en cargos gerenciales, entre un sinfín de tareas más”, destacan desde el proyecto.
Ahora bien, hasta ahí la ‘normalidad’, el mundo está cambiando y al fin las mujeres van ocupando espacios que podrían haber ocupado hace muchísimo tiempo pero que, en un mundo dispar por naturaleza, resultaba muy difícil. Sin embargo, lo que se quiere destacar aquí es la singularidad de la alineación que viene gestándose desde hace ya algunos años y que pareciera seguir creciendo. Podríamos decir que estamos frente a una “sizigia minera”, y cabe mencionar que los resultados hasta el momento son excepcionales.
La esfera minera
En Mina Cerro Moro, y como ocurre también en otras minas de Santa Cruz, las mujeres realizan diversas tareas con calidad, excelencia y altísimo nivel profesional. Al punto que dos de ellas, Melisa González Zeballos, primera mujer explosivista de la provincia y Carina Zini, superintendente de Relaciones Comunitarias e Institucionales de Cerro Moro, han sido galardonadas por la comunidad de Puerto Deseado por el desempeño en sus tareas. Los vecinos mineros de Don Nicolás tienen también, ocupando un puesto de muchísima relevancia, a Verónica Nohara, directora general de Administración, quien en simultáneo se desempeña como presidente de la Cámara Minera de Santa Cruz. Un poquito más lejos, en proximidades de Perito Moreno, Newmont alberga entre sus directivos a María Eugenia Sampalione, directora de Sustentabilidad y Relaciones Externas de la compañía y presidente además de la comisión directiva de WiM Argentina.
“La ‘normalidad’ señalada previamente empieza a tener características de singularidad, y eso que sólo nos hemos centrado en la esfera de la minería, sin ahondar demasiado en otras mujeres que vienen brillando también en la actividad, cada vez con mayor intensidad, como sucede en la que podríamos nombrar como ‘esfera política’, con la gobernadora Alicia Kirchner y un equipo de mujeres integrando áreas clave en la gestión: nos referimos a Silvina Córdoba, ministra de Producción, Comercio e Industria, Mercedes Argüello, subsecretaria de Minería de Santa Cruz; Rocío Campos desde el ámbito de la Responsabilidad Social Empresaria, y Mónica Vila, actual intendente de Puerto Deseado, desde el plano más local», explican desde Cerro Moro.
El fenómeno
Cuando los planetas se alinean ocurren cosas extraordinarias y hoy se experimenta una alineación única, cuya próxima revolución todavía está por verse. Es quizá el final de un enorme ciclo, o, ¿por qué no?, el comienzo de algo más grande aún. Lo cierto es que el rol de la mujer es indiscutible y fundamental en toda esta historia; y como ya se dijo, los resultados son muy alentadores: “La excelente realidad minera de Santa Cruz, los logros materializados desde lo individual y lo colectivo, y las mujeres que desde el ámbito público y privado de la provincia lideran la transformación de la industria minera, son pruebas contundentes de ello”.