Karen Elizabeth Fretes tiene 31 años, es oriunda de Gobernador Gregores, en Santa Cruz, y desde hace ya más de una década trabaja en la industria como operadora múltiple de equipos mineros y brigadista en Minera Don Nicolás. Sin dejar de soñar pero con los pies en la tierra, Karen sabe que emprender es una decisión difícil pero que puede brindarle un mejor futuro a ella y a su familia. Para hacer su ilusión realidad, ha decidido poner en marcha un proyecto de producción de pollos frescos de calidad para el abastecimiento de la demanda local en una primera instancia y luego regional. Conocé más de su proyecto.
Actualmente sos operadora de maquinaria pesada, estudiante y emprendedora. ¿Por qué se te ocurrió emprender una actividad extra y qué creés que puede aportarte la minería como industria a la hora de llevar adelante el proyecto?
Mi anhelo es seguir creciendo profesionalmente y convertirme en una mujer empresaria que apueste por emprender en su provincia aprovechando, para este proyecto en particular, mi experiencia en la industria minera, la experiencia de mi familia en el rubro agropecuario y el alto potencial que caracteriza a esta región, más que propicia para el desarrollo de actividades agropecuarias. En adición, actualmente estoy cursando la Tecnicatura en Gestión de Empresa Familiar, por lo que creo que el proyecto tiene mucho que ver con lo que soy, con lo que hago, con lo que estudio y con mis orígenes.
¿Cuáles son los primeros pasos de este proyecto productivo orientado a la producción de pollos frescos?
Este proyecto se realizará de forma familiar. Estaré acompañada por mis padres y hermanos y buscaremos en un primer estadio producir pollos carniceros para atender la necesidad local de Gobernador Gregores ya que nuestra familia tiene un mercado en donde podríamos canalizar parte de la producción y mantenernos competitivos. A escala regional, tenemos en vista algunos puntos de venta estratégicos, uno de ellos es sin dudas la actividad minera, de fuerte presencia en Santa Cruz, como así también es nuestra intención acercar el proyecto a localidades cercanas como El Calafate. Garantizar al cliente un producto fresco, local y hecho en familia es a lo que apuntamos.
¿Cómo trabajan para conseguir el financiamiento y viabilizar el proyecto desde todos sus ángulos?
Desde que comencé con la puesta en marcha del proyecto llevo adquirido un predio de 1 ⁄2 Ha en zona adyacente a mi residencia en la región conocida como Isla Fea. A futuro empezaremos con la construcción de las instalaciones para las cuales debo adquirir distintos materiales y maquinarias y cabe destacar que el proyecto lo estoy costeando a base de mi salario. Apuesto por este emprendimiento porque creo que con él podré independizarme y generar no sólo trabajo para mi y para los míos sino también para la comunidad donde resido actualmente, Gobernador Gregores, una localidad aislada en Santa Cruz.
¿Creés que el proyecto tendrá una buena acogida por parte de la industria minera santacruceña?
Creo que la minería como actividad podría ser un potencial gran cliente, sobre todo en Santa Cruz, que tiene una muy buena relación con la comunidad toda. En la actualidad mi proyecto se encuentra en proceso de inicio, en los primeros pasos, pero observo un gran potencial relacionado con lo que me propongo realizar y producir ya que en la zona aledaña no existen industrias similares.
En este sentido, es importante destacar la cercanía comunitaria que existe con respecto a la minería en Santa Cruz, situación que no se da tan fluidamente en otras regiones.
Sí, la minería en la provincia de Santa Cruz tiene un rol muy importante ya que es la mayor generadora de empleo causando una gran estabilidad económica entre sus habitantes y generando un gran beneficio para la comunidad. Esta es una ventaja para nosotros y también para que mi proyecto personal pueda ver la luz ya que esta es una actividad de largo plazo que podría dar continuidad al emprendimiento a lo largo de los años.
Hablando del futuro, ¿dónde te imaginás de aquí a diez años y qué mensaje quisieras compartir con otras mujeres?
En diez años me imagino como la propietaria del negocio que estoy emprendiendo y en constante expansión, logrando ampliar la cartera de mis productos a mercados locales, provinciales, nacionales e internacionales. A las mujeres como yo, que están deseosas por emprender y crecer, les diría que cuando existen ganas de desarrollarse todo es posible, solo hay que proponérselo, solicitar siempre ayuda profesional y hacer realidad esas ilusiones pese a las adversidades que se presenten. A pesar de que en el camino encontremos dificultades debemos potenciar nuestra creatividad. Como mujer, animo a las demás a crecer, potenciarse y repensarse en la actividad minera ya que es una profesión que antes solamente la realizaban varones y hoy en día está más que claro que una mujer se encuentra en la misma capacidad de realizar dichas tareas.