Representantes iberoamericanas expusieron en el encuentro de mujeres mineras organizado por International Women in Mining

Con el propósito de compartir el plan de acción de las distintas organizaciones de trabajadoras mineras en la región iberoamericana, International Women in Mining (IWiM) organizó el pasado miércoles 8 de julio un «gran encuentro de mujeres mineras» del que participaron cerca de 300 personas de distintas partes del mundo. Se trata del primer encuentro virtual de una serie de eventos orientados a articular, de manera conjunta, las políticas de esta entidad internacional que profundiza su participación en la industria minera. Estuvieron presentes: WiM Argentina, WiM Bolivia, WiM Brasil, WiM Colombia, WiM Ecuador, WiM México, WiM Perú y WiM España.

Bajo modalidad digital, el encuentro estuvo presidido por Bárbara Dischinger, fundadora de International Women in Mining, y Gladys Smith, responsable de IWiM en Iberoamérica, quienes ahondaron en los objetivos fundacionales de IWiM, entidad fundada para «representar a todas las mujeres que participan en la minería y fomentar la conexión entre las distintas organizaciones existentes». En la actualidad,  y a partir de la voluntad de las mujeres mineras de distintas regiones, ya hay más de 100 organizaciones WiM formales e informales en 48 países, con más de 10.500 miembros en todo el mundo que trabajan para establecer políticas de equidad en el sector.

 «Una de las razones por las que organizamos esta reunión virtual es para darle las gracias a todos los grupos WiM por el gran trabajo que están haciendo para cambiar el papel de la mujer en la industria», señaló por su parte Gladys Smith, y recalcó que todavía existe un largo camino por recorrer, especialmente en lo respectivo al acceso laboral y el ámbito educativo, donde aún es necesario impulsar la participación de más jóvenes en carreras relacionadas directa e indirectamente con la actividad.
En esta línea, el encuentro concluyó con la necesidad de establecer una agenda global que permita dar servicio y asistencia a las mujeres mineras haciendo uso de esta nueva voz colectiva y «participando en la generación de políticas y prácticas más plurales».